He aquí una cuestión que a menudo nos ha sido presentada: la de
saber si los Espíritus que responden con mayor o menor precisión a
las preguntas que se les dirigen, podrían hacer un trabajo de gran
extensión. La prueba está en la obra de la cual hablamos, porque
aquí no es más una serie de preguntas y respuestas, es una narración
completa y continuada como hubiera podido hacerla un historiador,
y que contiene una infinidad de detalles poco o nada conocidos
sobre la vida de la heroína. A los que podrían creer que la señorita
Dufaux se ha inspirado en sus conocimientos personales,
responderemos que ella ha escrito este libro a la edad de catorce
años y que había recibido la instrucción que reciben todas las
jóvenes de buena familia, educadas con esmero; pero aunque tuviese
una memoria fenomenal, no es en los libros clásicos donde se
pueden obtener documentos íntimos que difícilmente se encontrarían
en los archivos de la época. Los incrédulos –lo sabemos– siempre
tendrán mil objeciones que hacer; pero para nosotros, que hemos
visto a la médium en acción, el origen del libro no admite ninguna
duda.
Aunque la facultad de la señorita Dufaux se presta a la evocación
de cualquier Espíritu, nosotros mismos hemos comprobado, en las
comunicaciones personales que nos ha transmitido, que su
especialidad es la Historia. De la misma manera, ella ha escrito la de
Luis XI y la de Carlos VIII, que serán publicadas como la de
Juana de Arco. Se ha presentado en la Srta. Dufaux un fenómeno
bastante curioso. Al principio, era una muy buena médium
psicógrafa y escribía con gran facilidad; poco a poco se volvió
médium psicofónica, y a medida que esta nueva facultad se
desarrolló, la primera disminuyó; hoy en día escribe poco o muy
difícilmente; pero lo que tiene de singular, es que al hablar necesita
tener un lápiz en la mano, simulando escribir; es preciso una tercera
persona para recoger sus palabras, como las de la sibila. Al igual que
todos los médiums favorecidos por los Espíritus buenos, nunca
recibió comunicaciones que no fueran de un orden elevado.
Tendremos ocasión de volver a la Historia de Juana de Arco para
explicar los hechos de su vida relacionados con el mundo invisible,
y citaremos lo que ella ha dictado de más notable a su intérprete con
respecto a este tema. (1 vol. in 12º; 3 fr. Librería Dentu, en el PalaisRoyal.)