EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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49. Las dos primeras revelaciones fueron expresadas mediante la enseñanza directa porque debían imponer la fe mediante la autoridad de la palabra del Maestro. Los hombres no poseían un grado de progreso suficiente como para ayudar a su elaboración. Aunque las dos revelaciones fueron hechas al mismo pueblo, percibimos una sensible diferencia entre ambas, que concuerda con el progreso operado en las costumbres e ideas durante los dieciocho siglos que transcurrieron entre la primera y la segunda. La doctrina de Moisés es absoluta y despótica, no admite discusión y se impone al pueblo por la fuerza. La de Jesús es persuasiva, consejera, su aceptación es libre y produjo controversias aun en vida de su fundador, quien, por otra parte, no desdeñaba discutir con sus adversarios.